Expansión territorial
Cajamar es una entidad financiera vinculada a la economía social y en particular al sector agroalimentario español, por lo que su actividad está orientada al desarrollo de los sistemas productivos locales. Junto a su propio crecimiento orgánico, desde el año 2000 ha liderado un proceso de concentración e integración de entidades cooperativas de crédito en el que han participado 30 cajas rurales de Andalucía, Murcia, Madrid, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Baleares y Canarias, lo que supone un desafío en materia de seguridad física.
“El mayor reto en los últimos años ha sido integrar [los sistemas de seguridad de] las cajas rurales que se han ido incorporando al grupo”, dice su responsable de seguridad, José Manuel García. Estas cajas tenían sistemas de seguridad dispares y, en algunos casos, obsoletos.
En todo el territorio nacional, el grupo ha apostado por la comunicación GPRS/4G y por los videograbadores de Lanaccess, que han ido adaptándose a la renovación de sus cámaras.
Renovación continua
El 60 % de las 6.000 cámaras distribuidas en las instalaciones de la entidad son analógicas, cifra que va disminuyendo progresivamente en beneficio de cámaras IP.
“Continuamos con la renovación de equipos – dice José Manuel -, buscando sacar el máximo partido a la analítica que nos ofrecen los grabadores, enfocadas a las detecciones automáticas.”
Estas detecciones automáticas facilitan que la receptora de alarmas se ocupe de la seguridad de cientos de sucursales. La supervisión técnica también la realizan de forma automática.